Una enérgica y contundente novela negra en clave de western crepuscular con un estilo tan particular como inquietante.
Coveiro, el sepulturero de Balanegra, cava una fosa. Sin prisa. A golpe de pico y pala ahonda el agujero y mantiene a raya a sus fantasmas. Los muertos no recuerdan nada, y él debería hacer lo mismo. Y es que Coveiro sigue metiendo gente bajo tierra, solo que ahora, ya en la recta final de una vida de violencia, lo hace de manera legal.
Ahora dedica sus días a encargarse del cementerio y a cuidar a su sobrino Marco, un chico autista cuya única obsesión es aprenderse todas y cada una de las inscripciones de las lápidas. Pero el ayer, que asoma cada poco entre el mantillo como una flor de hueso, nunca se entierra como es debido. Y todo se tuerce cuando Rubí de Miguel, dueña de Carbac, la industria cárnica más importante del país, orquesta el sepelio del mayor de sus hijos, y sus hombres se topan con un testigo incómodo: Marco lo ha visto todo y deciden llevárselo con ellos.
Es entonces cuando Coveiro entiende que no hay redención posible para hombres como él, que ni la luz crepuscular es capaz de suavizar la superficie basta y roma del hierro viejo. Da igual cuántos años transcurran: las balas del pasado llegan siempre a su debido tiempo. Y ese tiempo ha llegado.
Marco Pariente entrelaza, a golpe de martillo, una trama llena de intriga y suspense, un protagonista memorable y unos antagonistas tan divertidos como escalofriantes.
Marto Pariente (Madrid, 1980), es escritor y funcionario del Estado. Es autor de La cordura del idiota (2019) —Premio Novelpol 2020, Premio de Novela Cartagena Negra 2020, y cuya traducción al francés ha sido incluida por la editorial Gallimard en su prestigiosa serie negra— y de Las horas crueles (2022).